Sé que algunos lo saben, pero la ausencia de estos días se debió a un horrible accidente que sufrimos con mi esposa, Natalia, en la carretera 89 en Quimilí, Santiago del Estero. Se nos reventó la cubierta delantera y volamos. Dos vueltas en el aire y caímos en el monte, a 30 metros de la ruta. Nos salvamos de milagro, por estar bien atados y por el airbag, invento maravilloso. Por suerte íbamos solos, sin los hijos.
Estos días hemos estado los dos internados en Santiago del Estero, ambos muy golpeados y con politraumatismos. Hoy nos trajeron en ambulancia a Resistencia.
Espero retomar vida y comunicaciones en una semana más y quiero agradecer todos los mensajes solidarios y afectuosos que recibimos. Fue lo mejor del episodio.
He aquí cómo quedó lo que fue mi automóvil.
Uh!!! Mempo querido!!!! No sabía nada del accidente!!!! Alegría enorme por saber que ya están bien!!! Un fueeerte abrazo para vos y otro a Natalia.
ResponderEliminarMe enteré gracias a la búsqueda del artículo tuyo publcado el 22 del 11 que lo volví a leer hoy después de haberlo escuchado a Víctor Hugo Morales!!!!
Mi admiración y gratitud siempre.
Helga