Mi artículo de hoy domingo en el diario The Buenos Aires Herald:
http://buenosairesherald.com/article/154524/political-opposition-and-native-hooligans
Y la versión en castellano, en el Página/12:
http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-241979-2014-03-17.html
¡¿No es fácil aprobar o desaprobar tal idea?! Qué horror, Mempo, leer esto que escribiste.
ResponderEliminarTe aviso, Mempo, que el costo por la falta de educación y la mala educación los docentes ya lo pagan todos y cada uno de sus días con dos y tres turnos inclusive en escuela que parecen resabios de postguerra. Escuelas donde concurren niños y jóvenes desbordados por la emergencia y la marginalidad en que crecieron (y son los docentes los que abrazan a "tus rehenes" cotidianamente).
Y todo esto lo pagan, con el dolor de saber que la sociedad entera ya está sufriendo un costo social altísimo porque los dirigentes de nuestro querido país no consideran la importancia fundamental que tiene la educación para el futuro de todos y cada uno de los que lo habitamos.
Fuiste docente pero, es obvio, que ya no caminás escuelas y sabés perfectamente que en el presupuesto de nuestros gobernantes la educación no es prioritaria. Estas detrás de un procesador de texto y te pagan por brindar este tipo de opiniones. ¿Cómo podés desilusionar de esta manera a tus lectores de siempre? Fue muy triste para mí leerte así.
Un abrazo, y suerte en esta lucha en que te haz embarcado pero que, realmente, no la entiendo.
María Tarragona
Mar del Plata
Puedo entender que una opinión mía moleste, pero no autoriza a que se ironice con eso de "tus rehenes". En todo caso es un tema que seguiré desarrollando en otros artículos, y como lo hago siempre: con respeto, con seriedad y fundamentos. Eso por un lado. Y por el otro, María, a mí nadie me paga por brindas opiniones, ni de este tipo ni de ninguno. Soy un profesional y escribo lo que me parece A MI y por supuesto me pagan, vivo de esto. Y si no les gusta a mis editores, me voy, como lo hice con La Nación. Se lo aclaro para que, aunque esté furiosa, no ofenda gratuitamente. Y ahora por favor, relea sin prejuicios lo que escribí, y ojalá me siga leyendo. Pero sin prejuicios, por favor, que yo no quiero aplausos ni condenas. Solamente entender y, en lo posible, ayudar a entender a mis lectores. Saludos, Mempo.
ResponderEliminar